Mapas, mapas, mapas. Por todas partes, hoy en día, los encontramos. ¿Por qué nos gustan tanto? Quizás porque, rápidamente, nos ayudan a encontrar patrones sobre un área o áreas geográficas en particular. Por esa razón, en este cuarto artículo sobre cómo usar la librería ggplot2 en R, me enfoco en los mapas, particularmente en los que podemos crear a partir de archivos SHP, «un formato sencillo que se utiliza para almacenar la ubicación geométrica y la información de atributos de las entidades geográficas. Las entidades geográficas de un shapefile se pueden representar por medio de puntos, líneas o polígonos (áreas)». Si quieres leer más sobre este tipo de archivos te recomiendo este artículo.
Antes de iniciar, abajo hallarás algunos conceptos claves y los enlaces de las publicaciones anteriores de esta serie: